Fundamentos del Sauna

El sauna húmedo tiene numerosos beneficios para el cuerpo y la mente. Sin embargo, es importante saber cómo usar estos saunas y qué tener en cuenta al iniciar con la terapia de calor. Para disfrutarlo de forma segura, es clave la hidratación, sesiones graduales y escuchar siempre al cuerpo.

Fundamentos del Sauna

¿Qué es un sauna húmedo?

Seguramente cuando pienses en un sauna te imagines un cuarto pequeño hecho de madera. Estos son los típicos saunas secos de estilo nórdico. Ahora bien, los saunas húmedos son diferentes: funcionan a diferente temperatura y mantienen un nivel de humedad específico, creando otro tipo de experiencia.

Los saunas húmedos utilizan un generador de vapor para producir un calor intenso y alta humedad. Las temperaturas oscilan entre los 54°C y 60°C, llegando a casi un 100% de humedad en el aire.

¿Por qué húmedo? El agua tiene mayor capacidad calorífica que el aire. Esto hace que el calor se sienta más intenso, aunque la temperatura sea más baja que en un sauna seco.

¿Para qué sirve el sauna húmedo?

La terapia de calor a través del sauna húmedo tiene numerosos beneficios:

  • Reducción de la inflamación sistémica.
  • Eliminación de toxinas.
  • Mejora de la circulación sanguínea.
  • Fortalecimiento del sistema cardiovascular.
  • Aumento de la capacidad pulmonar.
  • Reducción de niveles de cortisol (estrés).
  • Mejora de la salud de la piel.
  • Mejora de la recuperación post-entrenamiento.

¿Qué tener en cuenta para usar un sauna húmedo?

La hidratación

Tomar mucha agua antes y después de la sesión (un litro es una buena meta). Evitar diuréticos, alcohol y bebidas azucaradas.

El tiempo

  • Principiantes: 5 a 10 minutos.
  • Acostumbrados: 15 a 20 minutos.
  • Experimentados: 20 a 30 minutos (siempre escuchando al cuerpo).

Comenzá con 2 o 3 sesiones por semana y aumentá gradualmente si tu cuerpo se adapta bien.

La temperatura

Empezá con los niveles más bajos de temperatura y aumentá gradualmente a medida que tu cuerpo se acostumbra.

El ejercicio

Esperá 15 a 30 minutos después de un entrenamiento intenso antes de entrar al sauna para hidratarte y enfriar tu cuerpo primero.

Otras consideraciones

  • Al salir, duchate con agua fría (no helada) para regular la temperatura corporal.
  • Consultá a tu médico si tenés hipertensión, diabetes, insuficiencia cardíaca, ritmo cardíaco anormal o estás embarazada.
  • Evitar sauna si estás enfermo o bajo medicación que afecte la regulación térmica.
  • No consumir drogas ni alcohol antes, durante o después del sauna.
  • Después de una comida pesada, esperá una hora antes de usar el sauna.

Puede ser ideal usarlo a la noche para potenciar la relajación y mejorar la calidad del sueño.

(*) Alfa Hackers está diseñado para apoyar un estilo de vida saludable, no para diagnosticar, curar o prevenir enfermedades. Consulte con su médico de cabecera antes de comenzar con esta práctica.

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