Crioterapia y Dopamina

La dopamina, comúnmente conocida como una de las moléculas de la felicidad, y la exposición deliberada al frío tienen una estrecha relación. En este artículo te contamos cómo la crioterapia puede impulsar los mecanismos para la liberación de dopamina.

Crioterapia y Dopamina

¿Qué es la dopamina?

La dopamina es un neurotransmisor, es decir, un "mensajero químico" que lleva señales entre las neuronas y otras células. Otros neurotransmisores conocidos son la serotonina y la noradrenalina.

La dopamina participa en múltiples funciones cerebrales y fisiológicas, entre ellas:

  • Aprendizaje, atención y memoria: Ayuda a sentirnos con energía y mejorar la memoria a corto plazo.
  • Motivación: No solo nos recompensa después de una actividad, sino que también nos motiva antes de realizarla.
  • Placer: Genera la sensación placentera al vivir experiencias agradables.
  • Sueño: Regula el ciclo de sueño-vigilia en conjunto con la melatonina y el cortisol.
  • Estado de ánimo: Su deficiencia puede dificultar disfrutar incluso de actividades placenteras.

Alteraciones en los niveles de dopamina pueden generar consecuencias negativas. Por ejemplo, la enfermedad de Parkinson está asociada a la muerte progresiva de las neuronas productoras de dopamina.

(*) El exceso de dopamina también se asocia a trastornos como la esquizofrenia y la bipolaridad.

La relación con la exposición deliberada al frío

La exposición deliberada al frío implica exponerse intencionalmente a bajas temperaturas para obtener beneficios de salud, como sucede en la crioterapia.

Durante la exposición al frío, se liberan simultáneamente dopamina, noradrenalina y norepinefrina, lo cual mejora los niveles de atención, ánimo y energía.

El mecanismo podría tener raíces evolutivas: al liberar neurotransmisores de bienestar frente al estrés (como el frío extremo), nuestros ancestros aumentaban sus chances de sobrevivir.

Además, como el estrés crónico disminuye la actividad dopaminérgica, reducir el estrés con técnicas como la crioterapia puede potenciar los niveles de dopamina.

Un caso de estudio

En un episodio del Huberman Lab Podcast, el Dr. Andrew Huberman cita un estudio (Sramek, 2000) sobre exposición al agua fría:

  • Personas fueron sumergidas hasta el cuello en agua a diferentes temperaturas: 32°C, 20°C y 14°C, durante una hora.
  • En 32°C: No hubo cambios significativos en metabolismo ni en niveles de dopamina.
  • En 20°C: Aumento del 93% en la tasa metabólica.
  • En 14°C: Aumento del 350% en la tasa metabólica.

El dato más destacado fue el efecto sobre la dopamina: los niveles aumentaron en un 250% y permanecieron elevados hasta dos horas después de la exposición al agua fría.

"Estos efectos explican gran parte de la mejora de la atención, el bienestar y el estado de ánimo que típicamente experimentan las personas después de una exposición deliberada al frío."

- Andrew Huberman

(*) Alfa Hackers está diseñado para apoyar un estilo de vida saludable, no para diagnosticar, curar o prevenir enfermedades o condiciones médicas específicas. Consulte siempre a su médico antes de comenzar prácticas de exposición deliberada al frío.

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