¿Puede la crioterapia fortalecer el sistema inmunológico y reducir las probabilidades de enfermarse?

Puede sonar contradictorio, pero meterse en agua helada puede reducir las chances de que te resfríes tanto cada invierno. En este artículo te contamos por qué.

¿Puede la crioterapia fortalecer el sistema inmunológico y reducir las probabilidades de enfermarse?

Es muy normal la asociación entre el frío y las enfermedades respiratorias. Frases como “abrigate que te vas a enfermar” forman parte de nuestro vocabulario invernal. Y es cierto: los virus respiratorios como la gripe o el resfriado común son más frecuentes en invierno.

Pero, ¿y si te dijéramos que la exposición deliberada al frío podría tener el efecto contrario? Investigaciones sugieren que la crioterapia podría fortalecer el sistema inmunológico y proteger al cuerpo contra el resfrío, la gripe y otras enfermedades.

¿Qué es el sistema inmunológico?

El sistema inmunológico es la defensa natural del cuerpo contra enfermedades. Según el Instituto Nacional del Cáncer de EE.UU., es una red compleja de células, órganos y tejidos (como los glóbulos blancos, el bazo, la médula ósea y los ganglios linfáticos) que trabajan juntos para identificar y eliminar agentes patógenos como virus, bacterias y hongos.

 

Crioterapia y sistema inmunológico: ¿cómo se relacionan?

Una de las primeras pistas de los beneficios inmunológicos del frío provino del estudio de los nadadores de invierno. En países nórdicos, es común ver a personas sumergirse en aguas cercanas a los 1°C. 

En un estudio, investigadores de Helsinki reclutaron a 20 adultos sanos, de los cuales 12 eran nadadores habituales de invierno, mientras que las otras ocho personas no lo eran. A todos los participantes se les tomaron dos muestras de sangre: una en reposo y otra luego de que se hayan sumergido durante un minuto en un lago con agua helada.

  • El primer punto destacado fue que los nadadores habituales de invierno tenían más glóbulos blancos en circulación que quienes no se exponían al frío.

  • Además, al exponer muestras de sangre a una sustancia inflamatoria (LPS), los nadadores habituales mostraron una respuesta inmunitaria más intensa que los no acostumbrados al frío. Esto indica que la exposición regular a bajas temperaturas fortalece la respuesta del sistema inmune innato, a través de un mayor número de células inmunes que circulan en la sangre.

¿Por qué la crioterapia activa el sistema inmune?

La clave está en la paradoja del estrés. Aunque solemos pensar que el estrés es malo, ciertas dosis controladas -como la crioterapia- pueden provocar respuestas adaptativas beneficiosas. Este tipo de estrés agudo estimula la liberación de adrenalina, dopamina y endorfinas, reforzando al cuerpo y la mente.

Esto tiene bastante lógica si lo pensamos desde una perspectiva evolutiva. Nuestros ancestros se enfrentaron a desafíos extremos: climas adversos, lesiones, infecciones. Aquellos que experimentaron un aumento en la actividad inmune habrían tenido más probabilidades de sobrevivir en este contexto.

Por ende, tiene mucho sentido que nuestro sistema inmunológico haya evolucionado para movilizarse en respuesta a un factor estresante agudo. La crioterapia simula esas condiciones, ayudando a mantener ese mecanismo ancestral en funcionamiento.

Beneficios de la crioterapia para el sistema inmunológico

1. Aumento de los glóbulos blancos

La crioterapia aumenta la cantidad de glóbulos blancos y eleva las sustancias químicas antiinflamatorias dentro del cuerpo. Ambos factores son esenciales para combatir enfermedades e infecciones.

2. Aumento de la circulación sanguínea

Durante una sesión de crioterapia, los vasos sanguíneos se contraen para enviar sangre al núcleo y proteger los órganos vitales. Al terminar, la sangre oxigenada vuelve a las extremidades. En este proceso, el corazón bombea con más fuerza y la sangre fluye más rápido, llevando sangre más oxigenada y rica en nutrientes a todo el cuerpo. Esto da un boost al crecimiento de las células, lo cual tiene un efecto positivo sobre el sistema inmune.

3. Eliminación de toxinas

El aumento del flujo sanguíneo también facilita la eliminación de toxinas, lo que mejora la salud general del cuerpo.

4. Disminuye los niveles de cortisol

La crioterapia ayuda a liberar grandes cantidades de endorfinas, que reducen los niveles de cortisol (la hormona del estrés), lo cual favorece indirectamente al sistema inmunológico.

5. Aumenta las funciones celulares

Para que los órganos del cuerpo funcionen eficazmente, es necesario tener un buen crecimiento celular. Cuando las células funcionan a su nivel óptimo, todos los sistemas del cuerpo funcionan a un nivel superior. La crioterapia potencia el crecimiento y funcionamiento celular, clave para un sistema inmunológico fuerte y eficiente.


(*) Alfa Hackers está diseñado para apoyar un estilo de vida saludable, no para diagnosticar, curar o prevenir enfermedades o condiciones médicas específicas. Nuestras bañeras no son dispositivos médicos. Consulte a su médico antes de embarcarse en cualquier práctica de exposición deliberada al frío.

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